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Publicado el 19 julio, 2021
En 1886, Mercedes Benz revolucionó por completo la industria automotriz con las mejoras que presentó para un moto de combustión interna. Los motores de los autos comenzaron un largo trayecto de mejoras y adiciones de tecnologías, que han hecho que los motores que desarrollaban entre 2 y 3 caballos de fuerza, hoy en día produzcan 1,750 caballos de fuerza.
Después de todo este desarrollo, mejoras e historia, algo se ha mantenido constante, todos los motores de combustión interna requieren de un sistema de lubricación. Ya sea dentro de la cámara de combustión o fuera de ella, las necesidades de un aceite lubricante para motor ha evolucionado.
En el pasado, la forja que es el método con el cual se fabricaban los motores, vaciando metales fundidos en un molde, no tenían una precisión absoluta. Era necesario un periodo de asentamiento para que la fricción se encargara de terminar el formado de las piezas internas del motor. Debido a estos espacios o piezas con uniones no uniformes, se podría generar una ruptura dentro del motor. Para ello, el funcionamiento del motor en frío, sin revolucionar el motor, permitía que la temperatura se elevara y las piezas limaran las zonas que requerían.
Hoy en día, las tecnologías en la fabricación de los motores hacen partes y componentes con un margen de diferencia sumamente pequeños, con micras de diferencia entre uno y otro y comparado con el ajuste requerido. A esto le agregamos que todos los motores de autos nuevos pasan por estrictas revisiones de calidad y son probados en cuanto al ajuste y funcionamiento de estos para garantizar que todo está de acuerdo con los estándares de calidad del vehículo, mucho antes de salir a la luz y ser vendidos. Durante este proceso, esas pocas diferencias serán ajustadas.
Una vez que los motores de los autos están asentados, después de unos kilómetros en autos viejos y durante la fabricación en motores nuevos, hay que comenzar a protegerlos desde el momento que se enciende, la mejor forma de hacerlo es con una buena lubricación.
El aceite sintético para motor permite justamente esto, brindar protección desde el arranque del motor como si fuera un aceite lubricante con una viscosidad baja y mantener un gran nivel de protección cuando el motor ya esté a temperatura ideal de operación. Incluso lo protegerá si la temperatura exterior se eleva mucho, cosa que normalmente aligeraría el aceite, evitando que este tome la temperatura del motor de forma eficiente.
Ya los sabes, un auto nuevo puede usar aceite lubricante sintético desde el primer minuto, siempre y cuando cumpla con los requerimientos del fabricante del motor en cuanto a la viscosidad del aceite. Si quieres saber más acerca de los motores, nuevos o viejos, visita nuestro blog.