No todas las embarcaciones tienen motor, pero eso no quiere decir que no necesiten mantenimiento. Tal vez no incluya un cambio de aceite, aunque sí debes darle un buen mantenimiento al casco y a muchos otros elementos, si quieres mantener la embarcación a flote por muchos años.
Es claro que si no tienen motor, no requieren aceite lubricante, o sistema de enfriamiento o una transmisión, pero aun así tienen muchas partes móviles que requieren lubricación para que no se desgasten o corroan, y que después de un tiempo fallen de manera irremediable.
Poleas
Las poleas de las velas, que encontramos tanto en veleros con o sin motor, requieren estar libres de obstrucciones para conducir a la embarcación sin problemas. Por tanto debes lubrica los baleros de forma adecuada. Una grasa multilitio es ideal, ya que además de facilitar el movimiento de las cuerdas, tiene una gran resistencia contra el agua, por lo que su lubricación se mantendrá por más tiempo.

Las poleas de las embarcaciones están expuestas a una gran cantidad de corrosivos.
Dirección
Sí, además de utilizar las velas como elemento de propulsión los veleros y lanchas que no tienen un motor también cuentan con una quilla para apoyar en la dirección y no solo depender del viento. Al final del día la dirección de una lancha funciona de una manera muy similar a la dirección del auto, con una columna de dirección, una cremallera y un piñón que, al girar, empujan cilindros hacia lados opuestos.
Los cilindros que mueven la quilla hacia cada lado son apoyados por el líquido de dirección hidráulica que hace las maniobras suaves y silenciosas. Además protege los sellos y hules de la dirección, lo cual disminuye la fricción entre las piezas, para protegerlas del desgaste.
Manejo de un velero
Así como existe un reglamento de tránsito para los autos, existen normas de navegación para los vehículos acuáticos, las cuales evitan accidentes y situaciones de riesgo para los usuarios.
Ser negligentes con el mantenimiento de la lancha va en contra de dicha normas y pone aumenta la probabilidad de fallas en la lancha, lo que puede resultar en quedarte varado en alta mar o en el peor de los casos: hundimiento. Si quieres saber cómo darle mantenimiento a tu embarcación, ¡da clic aquí!