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Publicado el 11 mayo, 2021
El avance de las tecnologías en las fabricaciones de los motores ha influido directamente en el uso y aplicación de los aceites lubricantes para motor. Estos controlan la fricción y la temperatura en el interior. Adicionalmente ayudan a que el desempeño de la máquina sea la que el usuario espera. Con el paso del tiempo los motores, a pesar que el ciclo de combustión es muy similar, han cambiado significativamente.
Obtener la fuerza de la gasolina no es particularmente eficiente. Comparada con los motores eléctricos que consiguen por encima de un 90% de eficiencia, los motores de combustión alcanzan por un máximo 30%. Eso quiere decir que de cada $100 pesos que ponemos de gasolina a nuestro auto, solamente $30 pesos se usa para moverlo. El resto se desperdician en evaporación, calor, y fricción innecesarios. Hoy en día se utilizan sistemas como turbo cargadores, micro terminados, aceites lubricantes sintéticos y otros elementos para disminuir los elementos que incrementan el desperdicio del combustible.
Materiales más ligeros y motores más potentes han permitido disminuir la relación de peso potencia. En otras palabras, el motor requerirá menor esfuerzo para mover el vehículo y eso se traduce en menor necesidad de combustible para lograr el movimiento. La fabricación de motores es cada vez es más precisos y con un periodo de asentamiento mucho menor. Comparado con los motores viejos, la precisión que permite que cada componente esté listo para acoplarse con el resto es mucho mayor, además, existen menos pedazos de metal que corren el riesgo de desprenderse al interior del motor y quedar circulando ahí por un tiempo.
Los motores están desarrollados de acuerdo con las tareas que van a realizar. Se toman en consideración los aceites para motor que estarán disponibles para el correcto funcionamiento. La primera recomendación que hacemos es siempre apegarse a la viscosidad del aceite lubricante que recomienda el fabricante. Sin embargo, puedes agregar un aceite sintético de motor que lo protegerá sin importar las condiciones ambientales.
Un aceite lubricante sintético tendrá una adaptabilidad térmica superior a la de un aceite de motor con base mineral, que puede perder algunas de sus características en climas extremos. El aceite sintético para autos nuevos ayuda a que el asentamiento por fricción se realice de manera uniforme y con el menor daño colateral al resto de los componentes. Además de mayor recuperación de rebabas y desperdicios para llevarlos al filtro y enviar el riesgo de dañar el motor.
El cuidado del motor comienza desde nuevo. Con los aceites lubricantes adecuados y un mantenimiento oportuno, tu motor puede durar cientos de miles de kilómetros y te garantizará el máximo desempeño y la mayor eficiencia mientras funciona.
Para más consejos acerca del uso de tu vehículo y su mantenimiento, nuestro blog te ayudará a resolverlo todo, ¿Qué esperas para visitarnos?